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Desde esta sección podrá visualizar todas las veces que desee los vídeos y colaboraciones televisivas de nuestros profesionales en distintos programas de televisión relacionados con la salud. Todo lo que necesita saber sobre las enfermedades digestivas más habituales, en formato vídeo.
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Consejos para cuidar nuestro hígado
El hígado es el segundo órgano más grande del cuerpo (tras la piel) y tiene como misión depurar el aparato digestivo. Una de las enfermedades hepáticas más comunes es el hígado graso. Este puede producirse un consumo excesivo de azúcares (solo puede metabolizar 30gr al día), grasas, alcohol y falta de ejercicio. El Dr. Gonzalo Guerra, cirujano general y digestivo de CMED, añade que aunque no existen alimentos "quemagrasa" el consumo de alcachofas o cardo mariano ayuda a la estimular el funcionamiento del hígado.
Cómo mejorar nuestro tránsito intestinal
Los problemas con el tránsito intestinal son un motivo frecuente de consulta, especialmente, la diarrea y el estreñimiento. Cuando se tiene diarrea, explica el Dr. Gonzalo Guerra, cirujano general y digestivo de CMED, hay que optar por alimentos astringentes, como es el arroz blanco. Por su parte, cuando se tiene estreñimiento habría que tomar arroz integral, beber bastante agua y practicar ejercicio. En enero, suele haber más problemas de estreñimiento porque se han consumido muchas proteínas y azúcares que son más difíciles de digerir y también se practica menos ejercicio debido a las bajas temperaturas. La fibra es un pilar fundamental para un correcto tránsito intestinal. Lo idea es consumir 30 gramos de fibra al día. Esta se encuentra en verduras, frutas, cereales integrales y semillas.
El sobrepeso y la obesidad agravan los síntomas del coronavirus
El sobrepeso y la obesidad han demostrado causantes de un agravamiento de los pacientes infectados por la COVID19. Este problema se da en todos los grupos de edad, incluido el de las personas jóvenes. Tanto como el sobrepeso como la obesidad suponen una inflamación continua de los tejidos del organismo por lo que el sistema inmune permanece en una lucha continua para poder disminuir esa inflamación. Esta condición, unido al hecho de que la COVID19 provoca, de por sí, una gran inflamación, hace que las personas con sobrepeso y obesidad vean agravados sus síntomas en caso de ser infectados.
¿Cómo deben ser las comidas navideñas?
Las principales características de las comidas navideñas es su abundancia y el exceso de grasa y azúcares. El Dr. Eugenio Freire, cirujano digestivo de CMED, explica que para evitar las habituales digestiones pesadas deberían estar acompañadas de verduras en el plato principal y de fruta como la piña para el postre, ya que tiene una enzima que ayuda al aparato digestivo a hacer la digestión más fácilmente.
Cómo hacer buenas digestiones en Navidad
Las Navidades suelen ser tradicionalmente unas fechas en las que se tiende a comer en exceso. Para evitar que esto ocurra y que además se tengan digestiones más ligeras, el Dr. Gonzalo Guerra, cirujano digestivo de CMED, aconseja que no se permanezca mucho tiempo sentado a la mesa, que no haya predisposición a comer en exceso y que, por el contrario, no se acabe saciado en exceso. Existen dos frutas como son la piña y la papaya que ayudan a mejorar la digestión, aunque el mejor consejo es no abusar de la comida y la bebida.
Diferencia entre intolerancia y alergia a los alimentos
La intolerancia se da cuando nuestro organismo carece de una enzima que nos impide procesar correctamente un alimento. Los síntomas en algunos casos no solo afectan al aparato digestivo, como pueden ser dolor de cabeza o erupciones cutáneas. La alergia por su parte tiene unas manifestaciones inmediatas que pueden ser peligrosas para la persona que la tiene, siendo las alergias más frecuentes al cacahuete o al huevo. Las intolerancias más frecuentes son al gluten y a la lactosa. Las personas que no tienen este problema no deben dejar de tomar estos alimentos porque contienen nutrientes muy beneficiosos para el organismo.
Cómo afecta la edad a la digestión
Según van pasando los años la digestión se va haciendo de forma diferente, es decir, no se puede comer igual a los 20 que los 59 que a los 70 años. El Dr. Gonzalo Guerra Azcona explica que uno de los motivos es que el vaciado gástrico se hace cada vez más lento y otro es que la válvula que separa el esófago del estómago funciona peor, por lo que hay más tendencia a que una persona sufra reflujo. Otra cosa a tener en cuenta es que las grasas se digieren peor. Para digerirlas es necesaria la bilis, pero como el hígado y la vesícula biliar también funcionan peor, es más complicado digerir las grasas a las 50 que a los 20 años. La edad hace también que se tengan más gases, ya que el intestino funciona más lentamente, por lo que es más difícil expulsarlos de manera natural. Para mitigar estos problemas, el Dr. Guerra aconseja que las comidas sean menos copiosas, que comamos menos grasas, hacer ejercicio y también tomar probióticos.
El estrés empeora las digestiones
El estrés empeora las digestiones, ya que el aparato digestivo es el segundo cerebro por la gran cantidad de neurotransmisores que tiene, especialmente el intestino. El Dr. Gonzalo Guerra Azcona explica que la digestión comienza en la boca y el estrés hace que se genere menos saliva y se mastique peor la comida. Por su parte el estómago genera menos ácido y vacía más lentamente la comida. Y en el intestino pueden ocurrir dos fenómenos: diarrea y/estreñimiento.
En otoño empeoran las enfermedades digestivas
El otoño empeora las enfermedades digestivas (al igual que al estado de ánimo), especialmente a las personas que ya padece de ardor, de malas digestiones y gastritis, entre otras. Además, el Dr. Gonzalo Guerra Azcona explica que la bacteria helicobacter pylori, responsable de úlceras, gastritis y duodenitis, en otoño también prolifera más. Los pacientes con estas dolencias deben evitar platos muy calientes, ricos en grasa, los picantes, la bebidas con gas y el café. Esto es debido a que producen irritación en la mucosa estomacal.
¿Es bueno el ayuno intermitente?
El ayuno intermitente es una práctica que se ha puesto muy "de moda" para adelgazar. El Dr. Gonzalo Guerra Azcona, director médico y cirujano digestivo de CMED, explica que al hacer ayunos de 8-12 horas hacen que el cuerpo para tener energía recurra a las grasas para conseguirla. Sin embargo, es una práctica que no debe realizarse sin supervisión médica y que nunca hay que dejar de hidratarse. Si la hidratación se realiza con infusiones con zumos con productos depurantes, los riñones y el hígado pueden llegar a mejorar su funcionamiento. Este ayuno no debe superar las 24 horas y que lo que suele ocurrir en algunos casos es que el ayuno vaya seguido de atracones. Por lo tanto, recomienda hacer una ingesta diaria de 5 comidas pero siempre con alimentos saludables, bajos en grasas y en azúcares refinados.
