El hígado graso es una enfermedad hepática muy habitual que no presenta síntomas. Es la acumulación de grasa en este órgano que si no se detecta puede acabar derivando en una cirrosis hepática.

La Dra. Marta Abadía, especialista en digestivo y hepatología de CMED, explica que en la actualidad no existe un tratamiento farmacológico contra el hígado graso.

Los factores de riesgo asociados al hígado graso son el sobrepeso, la hipertensión arterial, niveles elevados de colesterol y triglicéridos y diabetes, ya que favorecen que se deposite grasa en este órgano.

El tratamiento existente en la actualidad consta de cambiar de hábitos de vida. La dieta debe ser una dieta mediterránea equilibrada, baja en grasas y azúcares. Se debe evitar el consumo de alcohol y hacer ejercicio físico de manera regular.

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