El organismo se depurar de manera natural a diario, sin embargo, si se comenten excesos con la comida (harinas y azúcares ultraprocesados, abuso de sal, alcohol), algunos suplementos como la silimarina y un mayor consumo de agua, frutas y verduras, ayudaran a nuestro hígado y riñones a trabajar más efectivamente.

El Dr. Domingo Carrera, médico especialista en nutrición de CMED, explica que la depuración es un proceso del cuerpo que hace de manera natural todos los días a través del hígado (metabolizando) y riñones (excreción de sustancias residuos tóxicos o metabólicos, incluso a través de la piel). son sistemas que funcionan bien. Si estamos sanos estos órganos funcionarán de manera correcta. 

Sin embargo, si hacemos comidas copiosas con mucha grasa, azúcar, sal o comida ultraprocesada, no está de más ayudar al cuerpo con esta purificación. Y también si se bebe demasiado alcohol.

También es aducuado ayudar al cuerpo a depurarse es tras una enfermedad en la que se ha tenido que estar postrado en cama por un tiempo. La actividad estimula el flujo de sangre al hígado y los riñones, con lo que su funcionamiento correcto es más rápido.

Si se ha  necesitado tomar antibióticos, es bueno colaborar con la purificación, ya que los metabolitos de esos antibióticos y los restos de bacterias que han causado la infecciones se eliminan mejor. En realidad, es tras una patología o periodos de tiempos de inactividad.

También habría que depurar el cuerpo si se ha realizado un ejercio extremo, ya que se generan metabolitos que es beneficiosos eliminar lo más rápido posible. Es decir, depurar el organismo es bueno tanto si se realiza mucha actividad como si no se realiza ninguna.

Para purificar el hígado, es recomendable el consumo de alimentos y líquidos que mejoren la función hepática. Estos incluyen vinagre de manzana, té verde, papaya, grosella, limón, pomelo, zanahoria, remolachas, verduras de eoja verde (acelgas y espinaca), aguacate, manzana, aceite de oliva, ajo, arroz integral, quinoa, brócoli y coliflor. Ayudan a proteger la membrana hepática y eliminar grasa y toxinas del hígado.

Para limpiar los riñones, hay alimentos con efecto antioxidante y diurético. Entre ellos se encuentran remolacha, arándanos, cereales integrales, apio, pescado azul, boniato, espinaca, acelga, col rizada, manzana, aceite de oliva, espárragos, piña, melón, berenjena, alcachofa, pimiento rojo, clara de huevo, cebollas y frutos secos. Sin olvidar tomar mucha agua.

También será bueno realizar ayuno de manera controlada. Con esto se consigue, especialmente, rengenerar las células de la mucosa digestiva.

Para puficarnos de los metales pesados, como son el mercurio y el cadmio, es recomendable la ingesta de algas, especialmente Chlorella y silimarina.

FUENTE: REVISTA MÍA